sábado, 19 de abril de 2008

¡A la Hoguera, carajo!

El Santo Oficio que todavia algunos llevan dentro (I)
Cada vez me convenzo más de que tratar temás de religión, ya sea por este medio o en cualquier otro, en sus aristas más controversiales, es bastante delicado.

Al parecer, opiniones diversas a las canónicas pueden ser capaces de hacer fluir expresiones enardecidas, que van a intentar no solo descalificar los argumentos que se esgriman, con el único fundamento de que la Iglesia lo ha dicho y ella es la poseedora de la Verdad, sino que también van a atacar a los dueños de las mismas, anatemizándolos y condenándolos anticipadamente al fuego que no acaba.

Pude inicialmente constatar esta situación en las respuestas dadas a un artículo que el periodista y escritor Rafo León publicó en su blog, referido a la controversia que ha generado el ingreso de un adolescente al seminario de una congregación religiosa católica, por medios que lindarían no solo con la coacción sino también con el acoso (según la madre del muchacho, que ha sido quien ha puesto a la luz pública esta situación.

Más alla de quien tenga razón en este conflicto, y de que a León se le pasó un poquito la mano con los epítetos con los que comienza su entrada, hay respuestas que manifiestan una total intolerancia frente a las ideas de otro:

"Si lo que Ud. quería, señor León, era rating, lo consiguió.Si eso deseaba y ya satisfizo su deseo, ojalá que ahora relea lo que ha escrito: A NADIE le gusta que critiquen ligeramente lo que uno considera valioso. Que a usted no le guste, que no haya tenido una buena experiencia o que sólo se rodee con sus pares no significa que tenga libertad para ser ofensivo con quienes sí creen en lo fundamental que da esa
institución. Un poco más de reponsabilidad en lo que escribe, señor León. Y una disculpa pública sería una muestra de su capacidad de tolerancia y apertura mental hacia quienes no piensan como usted y se han sentido ofendidos. Lo cortés no quita lo valiente".


Me he permitido extraer una de ellas. La primera frase en negrita contiene la clave para entender toda esta explosión de reproches. Yo en su momento fui un católico ortodoxo, que se fiaba plenamente de lo que dice la fe y de los que enseña la Iglesia. Lo incomodo llegó al ritmo que fui creciendo, cuando al acceder a instituciones educativas no confesionales como la academia o la universidad, conoci una visión alternativa de la Historia de la Iglesia y comence a hacerme preguntas que antes ni se me hubieran pasado por la cabeza: ¿Dios existe? ¿Jesucristo es el hijo de Dios? ¿La Iglesia Católica es la "verdadera" Iglesia?, entre otras. El pasar por esa experiencia es chocante, y para algunas personas doloroso, pero a la larga fortalece la fe de cada quién, conservando las verdades fundamentales y poniendo en entredicho las accesorias. Gracias a Dios tuve cerca de mi a religiosos que supieron entender mis dudas y aceptar mis disensos, sin querer sembrarme ningún remordimiento o complejo de culpa. Pero al parecer todos no tenemos cerca a la misma clase de eclesiásticos, como parece el caso.

Respecto a las disculpas, ni León ni nadie tiene por que hacerlas por expresar lo que piensa, siempre que esta manifestación no sea agraviante. Y sobre la tolerancia y la apertura mental, esas son virtudes que los creyentes debemos aprender a practicar más a menudo. Y tolerancia no es relativismo. Ojo. Tolerancia es la aceptación de que existen personas o agrupaciones que piensan distinto o profesan un credo o una ideología dispar a la nuestra, que tienen que ser respetados, y con los que se puede discutir en un debate de ideas y no de agravios.

Aqui otros comentarios más:

"Como dijo una comentadora, no toque un tema que no conoce. "Zapatero a tus zapatos ..."

Si esta frase la generalizaramos, me temo que el clero no podría inmiscuirse a hablar de sexualidad o de control de la natalidad. Pensar antes de escribir es mejor.

"Como ud podria opinar si sus declaraciones no son veraces, SE VA A IR DIRECTO SL INFIERNO ".

"Gracias a Dios, y conozco muy de cerca Avanzada Católica, he trabajado con ellos un lindo tiempo, y son personas A1, no coaccionan a nadie, ayudan a los chicos para vean el mundo de otra manera, que se acerquen a un Dios misericordioso, que perdona siempre, inclusive a personas como Ud. pues sepa Sr. León si hay gente que ni siquiera respetan a Dios y al Papa, que se puede esperar de este mundo,están logrando en la juventud un mundo sin valores, donde todo es subjetivo, lleno de sexo y droga, eso es lo que quieren para sus hijos? y todo es por la IGNORANCIA QUE ES MUY ATREVIDA, nunca pensé que Ud. era un lobo disfrazado de cordero".

"Hay una frase muy linda que dice "TUS HIJOS NO SON TUS HIJOS, SON HIJOS DE LA VIDA". A cualquier Católico practicante le encantaría tener un hijo Sacerdote. ¡Que orgullo!"

Respecto a este frase, creanme. Durante años he visto a respetables beatas en mi parroquia rezando rosarios, prendiendo velas, elevando al cielo novenas, entre otros cultos, pidiendo por más sacerdotes para la iglesia. Incluso no faltan algunas que te piden, compulsivamente, que entres al Seminario (hablo por experiencia). Sin embargo, ninguna de ella ha tenido EL ORGULLO de dirigir a alguno de sus 4, 5 o 6 hijos hacia esa vocación, sino hacia otras más "terrenas" como la Medicina, la Ingenieria, el Derecho (¡Siempre carreras rentables, eh!).Muy fácil es hablar.

"El que usted sea ateo, no significa que todos lo seamos. LOS VERDADEROS CATÓLICOS TIENEN QUE DEFENDERSE DE LAS ESTUPIDECES QUE HA VECES SE HABLA".

"Todos somos libres de elegir y si usted nunca sintio a Cristo, que pena da, porque es un gran sordo".

"Sordo, estúpido, lobo con piel de cordero". El costo de no decir AMEN. Asi sea.